
jueves, 19 de junio de 2014
Heridas.
Tengo ganas de gritarte lo que mis venas llevan callando tanto tiempo. Lo que mi mente enferma ha sido incapaz de pensar en voz alta. Mientras mis labios secos por la distancia de los tuyos intentan escupir lo que siento, mi corazón ya muerto y convertido en mil pedazos late. Late de nuevo. No es vida lo que queda en su interior, es esperanza de verte tan cerca, de casi notar como vuelves a ser mío...
Mis ojos rojos por la vida que llevo te recorren de arriba a bajo. Mientras bomito unas mariposas muertas por el tiempo, tu sonrisa se acerca lentamente. Susurras un hola tan frágil que podría romperse si hiciera un poco más de viento. Y entonces tus ojos atraviesan lo más profundo de mis pupilas, parece que me estés leyendo el pensamiento. Y es en ese momento cuando mi corazón jodido se pregunta qué pasó. Qué hizo que todo acabara. Y es justo ahí cuando te das cuenta de que el tiempo pasa pero no cura las heridas, algunas cicatrizan y otras solo se quedan abiertas cogiendo polvo. Y después de todo el tiempo que ha pasado, te das cuenta que aún sigues enamorada de una herida que todavía sigue abierta.

domingo, 18 de mayo de 2014
"Amigos"

lunes, 5 de mayo de 2014
Ya no te creo.
-Lo hice sin pensar, mi intención no era hacerte daño, de verdad. Sí, se que la cagué. Vale, pude que lo jodiera todo. Que sí que lo hice mal, pero por favor, para ya. Deja de reprocharme las cosas, deja de echármelo todo en cara. Te he pedido perdón mil veces, te he demostrado mil veces más que lo siento. ¿Qué más quieres? Enserio, ¿qué quieres que haga? ¿Que me arrodille y te pida perdón, que te jure que no volverá a pasar?
-Tus "Te quiero" sonaban tan reales...
-Y lo eran, y lo fueron. Joder que lo siento, las cosas cambiaron tan de golpe...
-¿Sabes qué es lo peor? Que me creí todas tus mentiras...
-No fueron mentiras, lo que vivimos si que no fueron mentiras.
-Tus besos, tus abrazos, tus caricias... todo mentira.
-Cierra la boca ya, no puedo más.
-Me mentiste.
-No te mentí, solo no te supe querer como merecías y preferí apartarme antes de hacerte más daño.
-Mientes otra vez.

-Y lo eran, y lo fueron. Joder que lo siento, las cosas cambiaron tan de golpe...
-¿Sabes qué es lo peor? Que me creí todas tus mentiras...
-No fueron mentiras, lo que vivimos si que no fueron mentiras.
-Tus besos, tus abrazos, tus caricias... todo mentira.
-Cierra la boca ya, no puedo más.
-Me mentiste.
-No te mentí, solo no te supe querer como merecías y preferí apartarme antes de hacerte más daño.
-Mientes otra vez.
Perdiendo el control.

jueves, 24 de abril de 2014
No es rencor.
No te odio por dejarme sola, por hacerme sentir sola. No te odio por romperme en mil pedazos, ni por provocar un terremoto en mi interior.
Tampoco te odio por el huracán de emociones ni por el diluvio de recuerdos. Simplemente te odio por irte, por dejar que un simple vendaval me aleje de ti. Que una simple brisa marina me despierte sola en mitad de una playa desierta de personas, desierta de amigos o de simplemente conocidos. Me alejaste de todo, me separaste hasta de los que consideraba familia y una vez allí, lejos, me abandonaste a mi suerte perdida en un laberinto sin salida. Pero opté por escalar y conseguí otra perspectiva, te vi perdido, se te había olvidado el camino de vuelta a casa. No pude evitar reír cuando te vi allí solo. La verdad es que no pensaba ayudarte, tan solo me senté a observar como te ibas tirando piedras a tu propio tejado hasta hundirlo. Cuando te diste cuenta, intentaste avanzar, volver a por mi, me necesitabas, me echabas de menos, lo vi en tus ojos y en tu falsa sonrisa. Pero ya era tarde, yo ya no estaba allí. En mi lugar había otra, otra con la que intentaste olvidarme, otra que te hizo recordarme más. Y ahora cada vez que te quedas solo de nuevo piensas en mi, en lo feliz que se me ve lejos de ti y en como no me afectó que te fueras.
Silencios que hablan.

sábado, 12 de abril de 2014
Sigue.

Suscribirse a:
Entradas (Atom)